¿Pueden Entrenar Juntos y hacer la misma Dieta un Hombre y una Mujer?

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¿Pueden Entrenar Juntos y hacer la misma Dieta un Hombre y una Mujer?

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En este Programa hablo sobre:

  • Diferencias entre hombres y Mujeres como Objetivos Estéticos
  • Fuerza
  • Niveles hormonales
  • Tipos de dietas que le funcionan a cada uno
  • Tipo de entrenamiento que debe realizar cada uno
  • ¿Qué pueden hacer igual y cómo pueden ayudarse mutuamente?

Esta pregunta que algunos y algunas os podéis a hacer se me planteó porque me escribieron una pareja que quería que les ayudara a conseguir el físico que deseaban y querían tanto entrenar juntos como poder llevar la misma alimentación.

Y la verdad que sería fantástico que pudiéramos entrenar con nuestras parejas o amistades de diferente sexo y conseguir ambos el cuerpo de nuestros sueños.

Entonces, la pregunta de: ¿un hombre y una mujer pueden entrenar juntos y conseguir el cuerpo que quieren cada uno?

La respuesta es un no enorme.

Y sé que os puede decepcionar, a mí el primero que me encantaría poder entrenar con mi mujer y comer lo mismo, porque facilitaría mucho las cosas, pero si ambos queremos conseguir el físico que deseamos, no podemos, sin lugar a dudas posible.

Ya de por sí, incluso dos personas del mismo sexo, edad y nivel aproximado de masa muscular, entrenar juntos aunque se consigan resultados y se avance, siempre va a haber diferencias en niveles de recuperación, una persona podrá entrenar más series al fallo, otra menos, otra se recuperará mejor, otra peor, y un largo etc…que hará, que si cada uno tiene su entrenamiento orientado a su perfil personal y habiendo visto lo que le va bien, siempre avanzará más, suponiendo que ambos entrenen con intensidad.

Lo que pasa que algunas veces, las personas cuando entrenan juntas, entrenan con mayor intensidad y mejor que cuando entrenan solas, si son disciplinados y van a entrenar, o sea, a lo que hay que ir y quieren progresar, entonces, esta falta de personalización en un entrenamiento a lo que le va a cada uno, se puede compensar e incluso ser mejor que hagan el mismo entreno si por su cuenta por comodidad se van a estancar en los pesos, van a faltar, van a descansar más de lo que deben entre series, en fin, un entrenamiento que no lo vayan a realizar eficientemente por falta de intensidad al no tener un compañero, pero salvando este caso, siempre se conseguirán mejores resultados si cada uno haga su entrenamiento y alimentación de forma individual incluso aunque sean personas del mismo sexo y perfiles parecidos.

Ahora, si ya de por sí, personas del mismo sexo, edad, nivel físico, conseguirían mejores resultados con su propio plan de entrenamiento si entrenan con intensidad y cada uno tiene su plan de alimentación específico, esta diferencia de resultados es muchísima más amplia y notable entre sexos.

Porque ¿cuáles son las diferencias que tenemos que tener en cuenta entre hombres y mujeres a la hora de entrenar y alimentarnos para conseguir resultados?

  1. Diferencia de estética que desea conseguir un hombre y una mujer

Los hombres por norma general van a querer desarrollar todos los músculos por igual hasta lo que le permita o casi su potencial genético, porque casi todo el mundo quiere un cuerpo fitness que son unos 5-7kg por encima de la altura a un porcentaje bajo de grasa.

Esto significa que un hombre quiere una espalda y hombros anchos, unos buenos brazos, además de piernas, etc…

Una mujer por el contrario, normalmente quiere tener un buen desarrollo de piernas, glúteos, buenos abdominales pero no quiere ni una espalda ancha, ni unos hombro anchos ni unos brazos y trapecios igual de grandes que los de un hombre, porque perdería feminidad, entonces todo lo que sea el tren superior los entrenamientos no deben ser para la mujer para desarrollar la máxima masa muscular posible como el hombre, y por tanto, diferentes. Igual que tampoco desean desarrollar pectorales, sólo realzarlos, por lo que una mujer haga 3 ó 4 ejercicios de press con el máximo peso posible cada semana sólo al final la masculiniza.

  1. Diferencia de fuerza

A pesar que en el tren inferior la fuerza no es tanta diferencia entre el hombre y la mujer inicialmente, aunque como el hombre tiene más capacidad de desarrollar músculo, al ir desarrollando más músculo, también se incrementará la diferencia de fuerza entre ambos con el tiempo, en el tren superior es muy grande.

Esto quiere decir que un hombre y una mujer que lleven ya unos años entrenando en serio no vas a ver a una mujer en una sentadilla con 160kg, y no porque proporcionalmente a su masa muscular no tenga la misma o casi misma fuerza que el hombre, sino porque su peso corporal va a ser mucho más bajo, y por tanto, en términos absolutos, no podrá mover tanto peso y esto en el tren superior las diferencias son enormes incluso en los primeros meses.

Entonces, al igual que entrenar dos hombres o dos mujeres con niveles de fuerza muy diferentes puede ser una pesadilla, entre un hombre y una mujer pasaría lo mismo. Si el hombre entrena duro y va progresando, va a tener que estar quitando y poniendo discos en la mayoría de ejercicios para que cada uno pueda tirar con los pesos adecuados y según sus niveles de fuerza, lo cual en cada serie hará que sólo en quitar discos inviertas decenas de segundos, por cada serie, en cada ejercicio, cada día.

A lo mejor no les importa, a mí personalmente, me parece bastante trabajo y hay que controlar mucho que no se pasen los tiempos de descanso y al final entre cada serie no pasen 3 minutos o más.

  1. Reclutamiento de fibras

La mujer tiene más dificultad en reclutar el mismo número de fibras musculares que el hombre y además de 2-3 repeticiones más por cada serie más que el hombre, puede y debe hacer algunas series más al fallo que el hombre, porque soporta más volumen de entrenamiento y lo necesita para progresar adecuadamente. Por lo que cuando un hombre con una serie al fallo en cada ejercicio suele tener suficiente o 2 si se es principiante, la mujer suele necesitar alguna más, además de un 20 ó un 30% más de volumen de entrenamiento.

  1. Niveles hormonales

Aquí hay varias cosas a tener en cuenta, tanto en el entrenamiento como en la alimentación.

En cuanto al entrenamiento, a diferencia del hombre, que suele tener un nivel hormonal constante y similar a lo largo de todo el mes, la mujer a medida que se va acercando la menstruación, unos días antes, sus niveles de estrógenos bajan y sus niveles de progesterona suben, además del sangrado y pérdida de nutrientes, lo que implicará que a nivel emocional y motivacional además de ser menor, también lo harán los niveles de fuerza, resistencia muscular y apetencia de ir al gimnasio. Por eso, esta semana se suele programar o una descarga o un entrenamiento de algo de menor intensidad, ya que además se produce una mayor retención de líquidos.

En cuanto a los sistemas hormonales y metabólicos de ambos sexos, la mujer, al tener de forma generalizada una mayor resistencia a la insulina, suelen funcionarle mejor las dietas más bajas en carbohidratos y más altas en grasa, igual que al tener una menor capacidad de síntesis proteica que tiene que hacerlo vía igf-1 al tener sólo un 10% de la testosterona que tiene el hombre, también va a necesitar un aporte proteico mayor.

Por eso, salvaguardando la diferencia de masa muscular y peso, que normalmente ya de por sí, haría que el hombre necesitara cantidades mayores de nutrientes, calorías y macronutrientes y micros, el plan de alimentación que deben llevar unos y otros incluso para el mismo objetivo deben ser diferentes.

Esto no significa que una comida, un almuerzo o incluso un desayuno no puedan comer lo mismo, pero las cantidades variarán además de algunas adiciones de alimentos por ambas partes que otro no debe llevar o en diferentes proporciones.

Por todo ello, lo mejor es que cada uno entrenéis por vuestra cuenta si queréis los mejores resultados a nivel estético de tener el cuerpo que queréis y el no hacerlo, os lastrará a ambos. Esto no quita, que podáis ir juntos al gimnasio, ayudaros en las series y que en algunas comidas algunos alimentos coincidan y podáis prepararlo y comerlo a la vez, teniendo en cuenta las cantidades que debe tomar uno u otro. Que siempre es más fácil, que hacerlo uno solo, si tu pareja entrena a la misma hora que tú, vais juntos y lleváis un plan de alimentación con algunas coincidencias.

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