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[smart_track_player url=”http://traffic.libsyn.com/masqueenforma/Programa102.mp3″ title=”Ejercicios Prácticos de Coaching para No Saltarte la Dieta ni el Entreno 1″ color=”#C9A381″ social=”true” social_twitter=”true” social_facebook=”true” social_gplus=”true” ]
En este programa hablo sobre:
- Por qué nos saltamos la Dieta y el Entreno
- Cómo Conseguir Motivación Intrínseca
- Qué es un Coach Nutricional y en Qué se Diferencia de un Dietista
- La estrategia de un Coach Nutricional de Principio a Fin para ayudarte a seguir la dieta
- Cómo definimos Objetivos, lista de Beneficios y Plan de Acción: Empoderamiento del Paciente
Muy buenas. Es difícil que una persona esté toda su vida cumpliendo con el 100% de sus entrenos y dieta porque somos personas en el que hay momentos en la vida, ya sea porque nos afecten cosas externas de nuestro entorno a nivel emocional o por nuestro yo interior, no tenemos la motivación ni estado mental adecuado para llevar con disciplina nuestro plan de entreno y alimentación y nunca he conocido a nadie que sea capaz de hacerlo, hasta los competidores de fitness y culturismo que llevan años de disciplina tienen estos momentos de bajón y pérdida de ganas.
Vamos a centrarnos en la parte emocional que nos lo impide y dejar de lado a otras causas que puedan ser que tengas picos de trabajo, que te lesiones que conllevarían otra estrategia. Aquí vamos a tratar la parte en la que disponemos del tiempo realmente, aunque la persona se ponga excusas de que no en algunas ocasiones, pero que no cumple con la dieta y entreno únicamente por una desmotivación y falta de ganas.
¿Qué hacemos en estos casos? Porque esto puede pasarnos a todos y te lo encuentras en diferentes perfiles de personas: la que nunca ha sido capaz de hacer dieta y lleva años comiendo mal hasta quien lleva años haciendo dieta y entrenando y de repente algo cambia a nivel emocional y ya lo hace a medias o lo deja.
Y este bajón emocional va a aparecer antes o después. Por eso, junto con la figura del dietista y entrenador, que puede ser el mismo profesional o puede ser otro profesional contratado aparte entra la figura del coach nutricional.
Muchas veces se confunde dietista con coach nutricional, aunque pueden ser el mismo o no. Un dietista te pone la dieta y un coach nutricional te ayuda a que seas capaz de seguir la dieta a nivel emocional, más allá del dietista de cambiarte un alimento por otro que no te guste o ponerte un batido si tienes una reunión de trabajo.
El coach nutricional y en general el coach, te ayuda a que vayas a entrenar todas las veces que te toca en semana y que sigas la dieta sin saltártela incluso con la nevera llena de tartas y chocolate.
Supongo que ahora estarás diciendo: wow, yo quiero un coach nutricional.
Aquí puedes hacer dos cosas: o contratar un coach nutricional que es algo que te recomiendo y si puede ser el mismo dietista que también tenga formación e incluya o puedas contratar este servicio mejor o que aprendas las herramientas de coaching nutricional para llevarlo a cabo por tu cuenta.
Cuando yo empecé a formarme en coaching nutricional empecé a conseguir ayudar a los clientes a que cuando tuvieran momentos, ya sea al inicio o pasados los meses o un año cuando se desviaban del camino que no ocurriera o que volvieran rápidamente a él.
Así que voy a dedicar una serie de programas con el mismo título pero con diferentes partes donde voy a simularte lo que un coach nutricional haría contigo en cuanto a la estrategia a seguir y los ejercicios prácticos que te pondría si contrataras sus servicios, y que yo mismo hago con algunos clientes cuando puede ser necesario, para que puedas ponerlo en práctica y ser capaz de seguir la dieta durante años.
Estos programas los iré intercalando con otros programas de otras temáticas para que no resulte muy aburrido el tratar un mismo tema durante semanas.
Lógicamente, contratar a un coach nutricional te dará mejores resultados porque te ayudará a sacar todo lo que necesitas tanto saber de ti cómo de las acciones a tomar en cada escenario, pero poniendo en práctica estos ejercicios te va a ayudar enormemente a seguir la dieta si en algún momento notas que te cuesta.
¿Cómo se suelen estructurar las sesiones de coaching con el paciente?
Lo primero que se suele hacer en la primera consulta es establecer los objetivos, luego valorar qué disposición tiene esta persona para el cambio, los obstáculos que tiene en el camino buscando soluciones, enfocarse en los puntos fuertes, identificar las creencias y valores limitantes y fuertes que tiene esta persona para con todo ello definir un plan de acción haciendo que el paciente se monotorice y se empodere, haciéndose responsable de todo.
Cada sesión de coaching termina siempre con una acción a hacer por el paciente.
En el coaching nutricional es el paciente quien se hace responsable de conseguir el objetivo.
Hay que trabajar tanto el coach como el paciente en la confianza y que esta vez va a ser capaz de conseguirlo reforzando sus puntos fuertes.
En este primer programa vamos a empezar por el primer punto que es lo primero que se suele hacer: establecer el objetivo.
Para ello, se suele utilizar una estrategia llamada prampe en el que los objetivos se definen de la siguiente forma. Coge papel y lápiz o tu ordenador y empieza a apuntar porque así es como tienes que definir tu objetivo u objetivos:
- Tienes que hacerlo en positivo, nunca en negativo. Por ejemplo: en lugar de decirte en negativo no estar gordo o no ser flaco, que no los entiende el cerebro decirte: estar más delgado o ganar músculo.
- Realista. Ya sabes. Nada de quiero perder 10kg en un mes o ganar 5kg de músculo en 2 semanas, de media, perder medio kilo de grasa por semana y ganar 1kg de peso corporal al mes donde la mayoría sea músculo.
- Tiene que ser acordado, o sea, que no te lo imponga nadie, que lo quieras tú. Si tu médico te dice que tienes que perder peso o tu pareja y tú no lo quieres, no funcionará.
- Tiene que ser medible siempre, algo cuantificable en números.
- Personal, o sea, depende de ti y nadie más. No depende de tu entrenador, de tu dietista, de tu pareja. Tú eres el responsable y el que lo quieres.
- Y por supuesto específico: quiero perder 10kg de grasa en 3 meses.
Ahora ya tenemos el objetivo, la meta, lo que materializará el resultado final en el que tendremos la certeza que lo hemos conseguido. Pero tienes que preguntarte siempre ¿para qué quieres esto?
Si tiene que bajar la tensión arterial y es algo que no le importa, céntrate en los beneficios que obtendrás que sí te importan como vivir más, poder jugar con tus hijos, dejar de dolerte la cabeza, poder comer cosas que ahora no puedes de vez en cuando…
Así que tienes que hacerte tu batería de beneficios respecto al objetivo u objetivos que vas a conseguir.
Ahora, una vez definidos tus beneficios visualízalos. Imagínate que ya lo has conseguido con ese futuro ya deseado siendo una realidad.
Sitúate en el entorno en el que te gustaría vivir en un tiempo. ¿Qué cambios ves en ti físicamente?¿cómo vas vestido?¿cómo te sientes?¿cuáles son las sensaciones que tienes?¿qué estás haciendo diferente?¿cómo te relacionas con las personas de tu entorno?¿qué ha cambiado que ya has resuelto tu problema de comer?
Siente a través de todos tus sentidos.
Ahora que ya tenemos los objetivos a conseguir, los beneficios que conseguiremos lo imprimiremos, lo miraremos todos los días nada más levantarnos o cuando flaqueemos en llevar bien la dieta y el entreno y haremos este ejercicio mental de imaginarnos con el físico que queremos. Este documento se le suele llamar plan de acción.
Es importante además, dividir la meta a largo plazo en objetivos a corto cada ciertas semanas para que veas qué cerca estás ya de tu objetivo y cómo vas. Te ayudan a ganar confianza.
Programa anterior de Más que en Forma:
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